LOS ABRAZOS INVISIBLES-MICRO RELATO

by - junio 05, 2018


Son las 11.55 a.m en España.
Sé lo que es el Vacío.
Tal vez no pueda explicarlo muy bien, pero lo reconozco.
Primero esa profunda soledad, ese estómago hacia dentro, ese agujero, ese saber que ese Negro tuyo te quiere decir algo.
Y que depende de ti, únicamente.

Pero la paradoja es, que cuánto mas solos nos sentimos, cuando nos decidimos a caer en ese agujero negro, empezamos a percibir, eso que llamo "abrazos invisibles".
Son pequeños detalles , aparentemente  sin importancia, pero que empiezan a acompañar unos a otros, a entrar  en coherencia, a ser notas dentro de un pentágrama,  parte de una partitura nueva y desconocida.

La noche anterior, uno de sus mejores amigos le envío el primero de esos abrazos, en la distancia , pero tan real que podía empezar a ver esa conexión que aún estamos descubriendo en toda su grandeza.
Y el adagio al día siguiente, otro mensaje de otra amiga,  le hizo ver el comienzo de algo, de algo que empezaba a ser!

Llegó a los juzgados, con la emoción a punto de desbordar los márgenes de su castro.

Al entrar, se encontró con otra cara amiga para su sorpresa, estas son esas casualidades que no lo son, Chema iba a ser quien le ayudara a dar los primeros pasos de forma efectiva,  si necesitas algo.. la abrazó, pero fue invisible, fue menos sentido en el cuerpo, y mas dentro, ella sabía que no iba a necesitar nada, porque ya comenzaba a fluir sólo, lo que se requería, lo estaba haciendo ella desde su absoluta implicación.
Agradecida, por poder ver como el Universo interno y el externo se confabulan sincronizandose.

Tenía que volver en un rato, y rellenar unos papeles, sacar copias, hasta tres veces se lo explicó, pero estaba observando tan profundamente , que apenas le quedaba espacio en el cerebro para almacenar ningún dato.
Salió , y vio un árbol con un banco para sentarse a su sombra.
Y se dio permiso.
El agua salía a borbotones y no quería contenerla más, había pasado demasiado tiempo, intentando  retener algo que debe estar en movimiento. Sabía que eso le acompañaría hoy, y quizás algún día más.
Pero ella misma eligió liberar a la presa.



Entiende que, cuando el cuerpo lleva tanto en la misma posición, siendo muro de contención, mientras, corazón, alma y esencia, claman, cuando quiere levantarse y comenzar a andar, los pies están por despertarse, las manos hormiguean, la espalda duele. Los ojos aún tienen que adaptar sus pupilas a la nueva claridad que tienen delante de ellos.

Pasaron muchos detalles más, el hombre de la copistería que le informó de dónde podría ir a comprar bolígrafos, el que estaba en la puerta de la carnicería y al que preguntó por el bazar chino y directamente , le regaló los bolígrafos, todos hombres, masculino sosteniendo al femenino, pudiendo aceptar su vulnerabilidad...y al mismo tiempo ese "adelante".

Me recuerda a esas escenas de peliculas en las que alguien se atreve a hacer algo, y empiezan a abrirle puertas.
Pudo percibir eso al mismo tiempo que el dolor de esa identidad que se resistía con uñas y dientes, cuánto más se acercaba al abismo, al abismo que ..curiosamente, era la salida.

Observó ese dolor mientras se rompía y quebraba esa estructura que la ataba, a permanecer, que le impedía descubrir nuevos escenarios, nuevos riesgos y desafíos, pero esta vez, sintió ternura, y como una madre firme pero cariñosa, se decía sí.
Te estoy diciendo sí.
Mas allá de esas capas, había otra voz que ya no podía acallar.
Se auto afirmó en lo mas profundo de su ser.
Ese paso, ese sí, era entender por fin a un nivel totalmente distinto, lo que significaba el concepto de libertad, tan pobremente entendido.

Aquello a lo que sólo dio la categoría de sueño por su estado inmóvil, dejó de ser fantasía, rompió la bolsa.. comenzó el parto.
Es como cuando te desabrochas esas ropas o te quitas esos zapatos, que ya no te quedan..y dejas que tu cuerpo se expanda, sea...tal como es.

Comenzó a ver el sentido oculto, la coherencia que guardaba todo, en el momento en que tomó las riendas y de la carga..se hizo cargo.

Fueron los abrazos invisibles,  comenzando por el que se dio así mism@, los que se lo confirmaron,  conectando unos con otros, te dicen, sí..es por aquí!, bienvenid@, te estábamos esperando


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